No hay nada como ir a ver una película sin saber
absolutamente nada de ella, con la posibilidad intacta de que te sorprenda o te
horrorice. Me paso con La invención de Hugo, mas allá de saber que esta basada
en un libro y ver un par de anuncios, mi desconocimiento de la historia que iba
a presenciar era absoluto. Fui a verla en 3D, del que no soy muy fan, pero en todas
partes parecían recomendar que debía verse así.
Hugo es la historia de un huérfano que vive en la estación
de trenes de Montparnasse en París encargado de el funcionamiento de los
relojes. Pero en verdad es mucho mas que eso. Hugo es una película de
apariencia fantástica que habla de la cruda realidad pero sin pasar en ningún
momento al sentimentalismo barato. Lo que cuenta es una de esas historias mas
grandes que la vida misma, que usando unas excusas y personajes maravillosos
acaba hablándote (sin que apenas te des cuenta) del sentido de la vida, de la
importancia de encajar y de lo necesarios que son los sueños, crearlos y
vivirlos.
Desde ese plano inicial de París uno se sumerge en el analógico
y luminoso mundo de un simpático Hugo, que cae bien desde el primer momento.
Esta es una de las pocas ocasiones que , sin llegar al nivel de Avatar, el 3D
esta mas que justificado y bien aprovechado.
Esta es una película amable, cálida y con ritmo que no decae
en ningún momento. Llena de imágenes sugerentes al servicio de una historia mas
grande que casi todo.
Martin Scorsese ha rodado un homenaje fantástico y
emocionante al mundo del cine, a sus comienzos y a las razones para formar
parte de el. La película gustara a todo el mundo, es lo que se podría llamar
una película familiar, pero de una profundidad y una belleza inusuales. Todo en
la pantalla brilla para transmitirnos el mensaje que Scorsese quiere, desde la
persistencia de Hugo, pasando por el ansia de aventuras y conocimientos del
personaje de Chloe Moretz hasta llegar a la tristeza de un magnifico George
Melies interpretado por el gran Ben Kingsley.
La invención de Hugo es una obra maestra, termino que se
utiliza demasiado en estos tiempos, pero que en este caso es absolutamente
cierto. Esta declaración de amor de Martin Scorsese al cine es una de las
propuestas mas estimulantes, emotivas y bellas que se pueden ver en estos
momentos. Motivos mas que suficientes para arrasar en los premios Oscar, que
este año nos han ofrecido una muy buena cosecha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario