La forma de ver la tele y el cine ha cambiado, hasta la forma de escuchar la radio ha cambiado. Cine, tele, podcast, libros, lo que se nos ocurra y nos guste (o no) lo contamos aquí.
The Artist es la película del año, sin duda. Así lo han
decidido los académicos de Hollywood y probablemente la mayoría de la gente que
la vea.
The Artist es una película muda, pero en serio, no es que
hayan hecho algo moderno recreando una película de cine mudo, no, es una película
muda y hace de ello su mayor virtud.
Envuelta en la etiqueta de comedia The Artist nos cuenta una
historia bastante convencional, que no es la primera vez que se cuenta, pero lo
hace de una manera irresistible. La película engancha desde el minuto 1, se
sigue muy bien y no aburre en ningún momento (lo digo para los que el cine mudo
los hecha para atrás). Pero es que además tiene algunas escenas que podríamos
catalogar ya de míticas, como la escena en la que ella abraza el traje de el en
su camerino o ese perfecto final con onomatopeya incluida.
La factura impecable y una perfecta dirección de actores
hacen de esta película un clásico instantáneo, que destila, al igual que La invención
de Hugo, amor hacia el mundo del cine por los cuatro costados, además de ser un
homenaje a los inicios del cine en Hollywood.
A pesar de todas las buenas recomendaciones que me habían
hecho tenia mucho miedo de ver la película, sobretodo por la calidad que se le
atribuye y la valentía que se le supone al ser una película muda en los tiempos
que corren. Pero todas mis dudas han sido disipadas de golpe por esta
excepcional película, que emociona con la fuerza de sus imágenes y la
emotividad de una historia clásica.
En los tiempos que corren es cierto que hace falta mucha valentía
para levantar semejante proyecto y acabar llevándote varios Oscar, pero lo que
realmente tiene valor es contar semejante drama y hacer que la gente acabe con
una sonrisa en los labios.
Redondeando y mejorando todo esto están una banda sonora
genial de las que se identifican inmediatamente y un perro encantador al que te
llevarías a casa sin pensarlo.
No hay nada como ir a ver una película sin saber
absolutamente nada de ella, con la posibilidad intacta de que te sorprenda o te
horrorice. Me paso con La invención de Hugo, mas allá de saber que esta basada
en un libro y ver un par de anuncios, mi desconocimiento de la historia que iba
a presenciar era absoluto. Fui a verla en 3D, del que no soy muy fan, pero en todas
partes parecían recomendar que debía verse así.
Hugo es la historia de un huérfano que vive en la estación
de trenes de Montparnasse en París encargado de el funcionamiento de los
relojes. Pero en verdad es mucho mas que eso. Hugo es una película de
apariencia fantástica que habla de la cruda realidad pero sin pasar en ningún
momento al sentimentalismo barato. Lo que cuenta es una de esas historias mas
grandes que la vida misma, que usando unas excusas y personajes maravillosos
acaba hablándote (sin que apenas te des cuenta) del sentido de la vida, de la
importancia de encajar y de lo necesarios que son los sueños, crearlos y
vivirlos.
Desde ese plano inicial de París uno se sumerge en el analógico
y luminoso mundo de un simpático Hugo, que cae bien desde el primer momento.
Esta es una de las pocas ocasiones que , sin llegar al nivel de Avatar, el 3D
esta mas que justificado y bien aprovechado.
Esta es una película amable, cálida y con ritmo que no decae
en ningún momento. Llena de imágenes sugerentes al servicio de una historia mas
grande que casi todo.
Martin Scorsese ha rodado un homenaje fantástico y
emocionante al mundo del cine, a sus comienzos y a las razones para formar
parte de el. La película gustara a todo el mundo, es lo que se podría llamar
una película familiar, pero de una profundidad y una belleza inusuales. Todo en
la pantalla brilla para transmitirnos el mensaje que Scorsese quiere, desde la
persistencia de Hugo, pasando por el ansia de aventuras y conocimientos del
personaje de Chloe Moretz hasta llegar a la tristeza de un magnifico George
Melies interpretado por el gran Ben Kingsley.
La invención de Hugo es una obra maestra, termino que se
utiliza demasiado en estos tiempos, pero que en este caso es absolutamente
cierto. Esta declaración de amor de Martin Scorsese al cine es una de las
propuestas mas estimulantes, emotivas y bellas que se pueden ver en estos
momentos. Motivos mas que suficientes para arrasar en los premios Oscar, que
este año nos han ofrecido una muy buena cosecha.
Ya hemos tenido tiempo de pasar la resaca de los premios
Goya, que se entregaron el domingo pasado, con buena audiencia y numerosas críticas
como siempre.Voy a ir en plan rápido a lo de la gala porque ese no seria
el tema principal ni importante cuando uno se pone a hablar de cine español.
La gala estuvo presentada con mucha clase y profesionalidad
por Eva Hache, que fue divertida, pero solo lo justo, ya que algunos de los
chistes eran inexplicablemente antiguos. Y los que no lo eran (los mas ácidos
que me gustaron a mi) parecían no hacer mucha gracia a un patio de butacas que parecía
una reunión de maniquíes. Incluso los que colaboraron, con honrosas
excepciones, parecían no ponerle muchas ganas. A pesar de esto, y de las tres
horas de duración, la gala fue entretenida por que la entrega de premios fue lo
bastante fluida como para no aburrir (para lo que son este tipo de eventos).
De los premiados nada que objetar, todos muy bien y todos en
su sitio. Personalmente me gusta mas La piel que habito, pero tengo que
reconocer que No habrá paz para los malvados es mejor película, y mucho mas
interesante para el gran publico.
Todo muy bien, excepto por una cosa. En medio de todo ese
entretenimiento dominical apareció el presidente de la academia de cine y su
discurso, tan cargado de hipocresía y mentiras que tuvo que hacerse acompañar
de dos vicepresidentas para aguantar mejor. Pero ni por esas. El discurso de
Enrique González Macho desprendía nervios e inseguridad, como si de verdad
fuera consciente de la cantidad de sandeces que estaba diciendo.
“Todos somos internautas…” es una frase que yo también he
utilizado para defender mis argumentos, pero dicha por según quien pone los
pelos de punta. No es posible que estén tan ciegos ni que crean que somos tan
estúpidos. Cualquiera que en estos tiempos diga que Internet no es ni una
alternativa ni un complemento para el negocio del cine es que vive
completamente de espaldas al mundo y a los tiempos que corren.
Quizás deberíamos cuestionar muchas cosas cuando empresas
como Netflix dan marcha atrás a sus intenciones de entrar en el mercado
español, a quien le interesa que este tipo de cosas no funcionen y quien saldría
mas perjudicado de que algún nuevo modelo de negocio empezase a funcionar.
Si nada cambia todo sigue igual, y me refiero a que se puede
seguir abusando del ciudadano en general y del consumidor de cine en particular
como se viene haciendo hasta ahora. Si uno mira la cantidad de películas subvencionadas
(y por cuanto) y la cantidad de películas que finalmente se estrenan y se
pueden ir a ver la sensación que le queda es de absoluta estupidez. ¿Cómo puede
ser que se estén quejando continuamente de la situación del cine español?, ¿Cómo
es posible que haya películas que se estrenen lo justo para poder cobrar la subvención
y no sea un hecho conocido por todo el mundo?. Esto debería ser algo que se
gritase a los cuatro vientos y aun no alcanzo a entender por que no es así. No
es que sea un rumor, o una leyenda urbana, son cosas que se saben y que en
algunos casos se han denunciado públicamente y que claman al cielo. No me
invento nada, podéis ver el ejemplo de Tinieblas González, que a pesar de su
nombre parece tener bastante razón en lo que dice (ya se que el vídeo dura
mucho, pero merece la pena verlo). Pocas veces se han explicado las cosas con
tanta claridad.
Pero volviendo al tema de Internet, es mentira que no pueda
ser una alternativa ni un negocio, el problema es que quieren seguir ganando
como hasta ahora y prefieren obligarnos a pagar a todos por su modelo obsoleto de
negocio en lugar de aceptar el cambio y los beneficios que podría generar ese nuevo
modelo.
¿Quién no esta deseando un Spotify de cine y series?. Yo
estoy ansioso por que esa alternativa exista, por un servicio que me ofrezca películas
y series con calidad y a un precio razonable. Y con razonable me refiero a una
tarifa plana que merezca la pena, no a cobrarme los estrenos aparte, ni a un
catalogo que haría llorar hasta a los adictos a los telefilmes de sobremesa. Ninguna
de las ofertas actuales (creedme que las he mirado bien) satisface mis expectativas
en lo mas mínimo.
A lo mejor es que los derechos de autor en nuestro país son
mucho mayores que en el resto de países, o que llamar delincuentes a la mayoría
de internautas sale mejor que ponerse a currar. Quizás quejarse es la manera
que tiene el mundo del cine español de darnos pena y que todo siga igual.
Yo no se exactamente cual será el papel de Internet en el
futuro del cine, lo que si se que ignorarnos y seguir tratándonos como
delincuentes, incluso legislando para ponernos las cosas mas difíciles, no es
una opción. Simplemente esa opción no existe. La expresión esta muy gastada
pero no por eso es menos cierta, no se pueden poner puertas al campo.
Yo era un espectador habitual de cine español, me encanta ir al cine, nada sustituye a una sala de cine, pero todo tiene un limite.
Cuando uno se acerca a un biopic, una película que te cuenta
la vida de alguien, suele hacerlo con una opinión ya hecha, sobretodo si ese
personaje es contemporáneo. La figura de Margaret Thatcher fue muy importante
en el Reino Unido, eso es evidente incluso para los que la odian. Buena prueba
de ello es la cantidad de películas que su estancia en el poder provoco,
contadas por cineastas mas o menos buenos que vivieron aquellos “malos” tiempos
siempre desde la perspectiva del pueblo.
Para mi, quizás por mi edad cuando ella estaba en el poder,
Margaret Thatcher solo era un personaje borroso del que solo sabia que había
jodido mucho al pueblo y que su etapa al frente del gobierno británico se
calificaba de oscura y cruel. Sin embargo, al parecer, económicamente no les
fue mal. En ciertos momentos tuve la sensación de que la situación
se parece a nuestro presente, salvo por lo económico, claro.
Pero todo eso desapareció de mi mente al poco de comenzar a
ver la película. La película esta contada de una manera excelente, desde una
anciana Thatcher vamos partiendo hacia distintos flashbacks, utilizando como
excusa desde la primera secuencia del film el amor, donde ya podemos intuir por
donde va este biopic. El hilo conductor de esta pequeña historia es uno de los
mas bonitos que recuerdo.
Si, habla de la vida de Margaret Thatcher, saltando a
distintos momentos de su etapa política, pero centrándose únicamente en la
persona, en la señora mayor que es ahora. En ningún momento se intenta dar
opiniones al espectador, solo se muestran hechos y frases que sucedieron o que
se dijeron. Pero con unas pocas pinceladas uno se olvida inmediatamente de todo
lo que tenia entendido sobre este personaje, y se deja llevar por una magnifica
interpretación y un excelente ritmo, pausado pero capaz de emocionar en el
momento mas inesperado.
Esta es una de esas películas en la que cuenta tu propia
capacidad de emocionarte, de entender lo que te están contando de verdad. La
historia de una mujer, una historia de amor, una historia de aceptación y superación
con un transfondo amargo que llega muy dentro.
Phillida Lloyd, que ya dirigió a Meryl Streep en la divertidísima
Mamma Mia, consigue una película emotiva, seria y brillante.
Se acercan los Oscar y a los cinéfilos se nos amontona el
trabajo. Normalmente hay tantas opciones en el cine que ves un par y las demás
las dejas para después. Este año llevo tres de las nominadas a mejor película y
las tres son excelentes, cada una en su estilo, pero hoy nos centramos en
Criadas y señoras.
Como su titulo en castellano indica (el original es The
Help) la cosa va precisamente de eso, de criadas y señoras, relaciones entre
señoras y su servicio en la época en la que el servicio en Estados Unidos era
negro y las cosas estaban a punto de cambiar mucho por muchas razones.
Pero quitaros la idea de los cotilleos y rumores de la
cabeza. El contexto histórico y el punto de vista convierten a esta película en
una de las mas duras en cuanto a las relaciones humanas se refiere. Lejos de la
violencia física de otras películas que tratan el tema del racismo en Usa,
Criadas se acerca de forma directa a la violencia mental vivida a diario. Sin
tapujos nos enfrentamos a unas situaciones de las que somos conscientes pero
que nunca se nos hubiese ocurrido que nos producirían ese nivel de vergüenza,
presentadas con una contundencia y brutalidad sorprendentes.
Sin darte cuenta, después de diez minutos la historia te
atrapa y los personajes te van ganando, tanto para odiarlos como para
quererlos. Viola Davis y Octavia Spencer están fantásticas (y nominadas), pero
yo me quedo con Emma Watson y Bryce Dallas Howard, la buena y la mala respectivamente
de esta historia que cuenta las cosas de manera directa y emocionante, que se
queda en la memoria y que te toca bastante.
Mas allá de los premios (no entiendo tan pocas nominaciones)
esta es una de esas películas que se van recomendando y que con el tiempo acaba
viendo todo el mundo.
Dramática, profunda y muy bien hecha, Criadas y señoras es
una de las películas del año que hay que ver.
En fin, no se por donde empezar. Hace mucho tiempo que no
actualizaba el blog, y me gustaría decir que no he podido, pero la verdad es
que no he querido. Como suelo leer otros blogs, tengo la sensación de que a
todo el mundo que escribe uno le acaba pasando algo parecido, siempre
encuentras un momento en que lo van a dejar y luego, por algún motivo siguen.
Vamos a saltarnos esa parte y pasaremos directamente a que me apetece volver a
escribir. Quizás es solo por que me apetece, o quizás solo necesitaba que alguien
me dijera que le interesa lo que opino (soy así de simple). El caso es que me
apetece hablar de lo que sea, quizás no solo de tele, y creo que he recuperado
las ganas de decirle al mundo lo que opino aunque a este le importe mas bien
poco o nada. Empezamos, como no, con el nuevo programa de mi adorada Lujan
ArgÜelles.
El pasado lunes se estreno en Cuatro, ¿Quién quiere casarse
con mi hijo?, un nuevo docu-show, del estilo de Granjero busca esposa, mas o
menos.
Empezare quejándome de lo poco que vimos a Lujan, a penas
acompañando a cada concursante a la sala donde conocería a sus pretendientes.
Quiero verla mas, que voy a tener que recuperar Password para quitarme el mono.
Del programa hay mucho que decir, pero antes algunas
aclaraciones. La mayoría de participantes en este programa no tendrían el mas mínimo
interés de no ser por los conflictos que se generaran entre ellos. Por que la mayoría
no necesitarían un programa de televisión para conseguir pareja, y por pareja
me refiero a un polvo, que es lo que buscan. Por eso, salvando un par de
excepciones, lo que nos interesa es ver como se sacan los ojos entre ellos, y
viendo el material, cuando peor se pongan las cosas mejor nos lo vamos a pasar.
Asi por encima, entre los mozos casaderos tenemos: un pijo
de derechas (¿esto es redundante?), un informático virgen (¿y esto?), un científico
striper, un estudiante modelo y un empresario gay. Espero que los dos primeros
nos den el juego que prometen, por que los demás son de lo mas patético y
previsible.
Otra cosa son las madres ,esas si son divertidas y además no
se cortan un pelo. Pueden ser tan patéticas como sus hijos, pero no se cortan
nada con sus opiniones. De hecho ya hay quien ha tachado el programa de racista
y clasista cuando no es cierto. La gente es eso, los programas no. De todas
formas si no se pudiese emitir por televisión nada racista y clasista Intereconomia
seria un fundido en negro.
Total, que me gusta, lo compro, quiero ver a esos “ilusionados”
hombres desatar sus hormonas en televisión y a esas “señoritas” intentando
llevarselos al huerto, pero sobretodo quiero ver que tienen que decir sus
madres, que son las autenticas protagonistas.